martes, 2 de diciembre de 2008

Sonando


MusicPlaylist
Music Playlist at MixPod.com

En defectuoso!!!!

Por fin, se dignaron a sacarnos de veracruz, si despues de 4 semestres por fin realizamos nuestro primer viaje como generación por parte de la escuela; y auque lo admito todos nos queriamos ir por las pachangas que se armarían, resulto en cambio muy productivo el viaje.

Para mi en especial las visitas a BBDO, IBOPE, Canal 22, MVS y CEPROPIE fueron de lo más interesantes con respecto a lo que cada visita abordaba, para mi en especial fueronla de BBDO donde por fin pude ver un posible campo de desarrollo tanto de mi carrera como de mi gusto personal y la otra fue IBOPE que apesar de ser en su mayoria analisis cuantitativo llamo fuertemente mi atención y claro MVS donde por golpe de suerte terminamos siendo parte de una grabación; el resto de las visitas me sirvieron para confirmar parte del conocimiento que ya tenía por parte de la escuela, aunque claro no es lo mismo la escuela que el ambiente ya por asi decirlo, laboral.

Y como todo viaje de estudio, tuvieron sus momento para fiesta y oscio que aunque fueron pocos...son muy bien recordados, con sus pros y contras ja ja!

Esperemos y este no sea nuestro ultimo viaje, puesto que considero que todavía queda mucho más por ver y conocer.

martes, 4 de noviembre de 2008

"El Cóndor"


Kevin David Mitnik, alias El Cóndor, nació el 6 de agosto de 1963 en Van Nuys, un pequeño pueblo al sur de California.
Desde muy joven sintió curiosidad por los sistemas de comunicación electrónica, cultivando y desarrollando un deseo casi obsesivo por investigar, aprender y lograr objetivos aparentemente imposibles. En la adolescencia Mitnick ya se había convertido en todo un fenómeno.
A los 16 años marca su primera línea tras la barrera del lado oscuro, del que ya nunca se separaría: se saltó la seguridad del sistema administrativo de su colegio; sin embargo, no lo hizo para alterar las calificaciones escolares, como podría pensarse, sino solo para mirar.
De aquí en adelante comenzaría su andadura como delincuente. Se comenta que Mitnik adoptó su alias o nombre de guerra (Cóndor) después de haber visto la película protagonizada por Robert Redford “Los tres días del Cóndor, ya que en cierto modo se sentía identificado con el protagonista. Redford encarnaba a un empleado de la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos (CIA) que se ve envuelto en un turbio asunto que continúa con una implacable persecución. Su nombre en clave es cóndor y Redford utiliza su experiencia para manipular el sistema telefónico y evitar ser capturado.
Una de las tesis que se escribierón reflexionando sobre el eco que tuvo Mitnick en la sociedad y entre los propios hackers fue que la seguridad informática de aquella época era tierra de nadie; la informática apenas había despertado y los conocimientos informáticos de usuarios y técnicos no representan el abismo actual.
Kevin Mitnick fue acusado de robo de software, fraude electrónico, daño a los ordenadores de la Universidad del Sur de California, robo de archivos e intercepción de mensajes de correo electrónico. Entre las compañías afectadas figuraban Nokia, Fujitsu, Nec, Novell, Sun Microsystems, Motorola, Apple... Se declaró no culpable y la sentencia le condenó a 5 años de cárcel sin posibilidad de fianza, lo cual enervó a los miles de hackers que seguían apasionados la historia del Cóndor y que comenzaron la conocida campaña Free Kevin! (liberad a Kevin) alterando páginas web muy conocidas: Unicef, New York times, Fox TV etcétera.

Mitnick, quien fue liberado en enero del 2000 tras permanecer casi cinco años en una prisión federal, estuvo bajo libertad condicional hasta enero de 2003, donde la jueza instructora del caso, Mariana Pfaelzer, prohibió a Mitnick accerder a cualquier tipo de ordenador, teléfono móvil, televisión, o cualquier aparato electrónico que pudiera conectarse a internet, con lo cual su abstinencia informática le acompañó también durante estos tres años posteriores a su salida de la cárcel.
Pese a esto, Mitnick no perdió el tiempo. Lanzó su propia empresa, Defensive Thinking, una consultoría sobre seguridad, y comenzó a escribir un libro sobre su historia. A pesar de que según sentencia judicial tiene prohibido obtener beneficio económico de ello hasta el 2010, el 4 de octubre de 2002 salió a la luz The art of deception (El arte del engaño), donde describe técnicas de manipulación y persuasión gracias a las cuales se pueden obtener los códigos necesarios para entrar en la red de una empresa y hacerse pasar por otra persona, por ejemplo. Su lanzamiento se explicó aduciendo que el libro tenía finalidad educativa. "Ciertas técnicas y artimañas les he utilizado contra algunas empresas, pero todas las historias del libro son ficticias", afirmó.

A finales de 2003, Kevin anunciaba su segundo libro: The art of intrusion. El anuncio se
realizaba de una forma muy peculiar, ya que Kevin afirmaba estar buscando historias que puedan ser contrastadas y que narren el como lo hicieron, preservando la identidad de los asaltantes. Los "hackers" seleccionados recibirían como pago una copia del primer libro de Mitnick, "The Art of Deception", un ejemplar del segundo, en ambos casos firmado por el autor, y la opción de conseguir el premio al mejor asalto, dotado con 500.000 dólares.

Como datos curiosos, Mitnick participó en algunas series de televisión; entre ellas, apareció en Alias de la ABC interpretando a un informático de la CIA; produjo un show radiofónico y vendió algunas de sus posesiones (un Toshiba Satellite 4400SX y un Toshiba 1960CS ).

Se han hecho películas sobre su vida como Takedown (Asalto Final) en el 2000, también conocida como Hackers 2 y algunos libros como Cyber Alert: Portrait of an ex hacker, The Fugitive Game : Online with Kevin Mitnick, The Cyberthief and the samurai, o Takedown.

En la actualidad, Mitnick es consultor de seguridad, se dedica a dar conferencias sobre protección de redes informáticas, ingeniería social, etc, a lo largo y ancho del mundo, a seguir escribiendo libros, y... recaudando bastantes millones de dólares con ello.

jueves, 16 de octubre de 2008




La tradición popular.

Para la iglesia católica, Todos Santos y Fieles Difuntos; para la tradición popular mexicana, muertos chiquitos y muertos grandes. Comúnmente denominada La Fiesta de Día de Muertos es una serie de prácticas que lo mismo nos lleva al recogimiento que a la fiesta, al llanto, que al regocijo del recuerdo.
Nuestros muertos se toman el permiso para deambular y hacer sentir su presencia entre nosotros. Los recibimos con un ánimo en el que la alegría y la tristeza se entremezclan; arreglamos su sepulcro para compartir con ellos los alimentos; preparamos ofrendas que colocamos en nuestra casas o en sus tumbas; elaboramos comidas y bebidas especiales, tocamos música y bailamos en su memoria, componemos versos, lo mismo muy sentidos que burlones, en fin, lloramos, reímos e incluso nos mofamos de la muerte y de los difuntos, eso sí, con todo respeto.
Año tras año compartimos un rito donde nos reunimos simbólicamente los vivos con los muertos, en un acto que a los vivos nos sirve para recordar a nuestros difuntos para afirmar nuestra creencia de que algún día nos reencontraremos con ellos, en el mundo de la convivencia pacífica.
Esta festividad comprende varios días. De acuerdo con la tradición popular generalizada, el 1ro de Noviembre se dedica a los niños y el día dos, a los adultos. En algunos lugares la celebración inicia el 28 de Octubre, día dedicado a aquellas personas que murieron en algún accidente, mientras que en otras, el día 30 de Octubre se recibe a las almas de los "limbos", menores que murieron sin ser bautizados.
Por lo general, la celebración es preparada con días de anticipación; la familia y los pueblos enteros se dedican a la elaboración de artesanías, bebidas y platillos que ofrendarán, así como al acopio de los materiales con los que se construirán y adornaran los altares. También en días previos se arreglan y adornan las tumbas en los cementerios.

Altares de vida para los muertos

Un elemento primordial del Día de Muertos es la ofrenda dedicada a los difuntos. En su elaboración interviene toda la familia para recordar y rendirles tributo; por unos días se convierte en altar a la memoria y al reencuentro con el pasado. Se cree que a este lugar arribarán las ánimadas para disfrutar de los alimentos y las bebidas que en vida prefirieron. En la ofrenda también son colocados elementos simbólicos y rituales de acuerdo a las costumbres locales o familiares. También es costumbre adornarlas con arcos de flores y papeles multicolores.
No existe un modelo de ofrenda, sin embargo hay elementos que podemos encontrar en la mayoría de éstas, lo importante es el sentido que cada familia, cada grupo y cada pueblo le da.